Junto a los presidentes de Brasil y Chile habló de justicia social y cambio climático
El Papa León XIV recibió a Lula y a Boric en audiencias separadas
Durante el encuentro con Lula, León XIV fue invitado a participar en la Cumbre del Clima que se celebrará en noviembre de 2026 en Belém, en el corazón de la Amazonía.
Martes, 14 de octubre de 2025

El Papa León XIV recibió este lunes en audiencia a los presidentes de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y de Chile, Gabriel Boric, en una jornada de intensa actividad diplomática en el Palacio Apostólico del Vaticano. En encuentros separados, el Papa dialogó con ambos mandatarios sobre la situación social de sus países, el papel de la Iglesia en la lucha contra la pobreza y los desafíos globales vinculados al clima, la justicia y los derechos humanos.
Mientras Lula centró su conversación en la desigualdad y el cambio climático, Boric abordó las heridas abiertas por los abusos sexuales en la Iglesia y el papel de la fe ante la pobreza y la migración. Las dos audiencias de este lunes consolidaron el perfil pastoral y político de León XIV, el primer Papa estadounidense y peruano de la historia. Misionero agustino en Perú durante la década de 1980, centró su primer año de pontificado en la denuncia de la desigualdad, la corrupción y los abusos dentro de la Iglesia. Con Lula y Boric, el Papa reafirmó ese compromiso y dejó una frase que, según testigos, repitió al despedirse: "Donde haya pobreza, allí debe estar la Iglesia".
Lula y la agenda climática
Durante el encuentro con el presidente brasileño, León XIV fue invitado a participar en la Cumbre del Clima (COP30), que se celebrará en noviembre de 2026 en Belém, en el corazón de la Amazonía. El Papa agradeció la invitación, pero explicó que no podrá asistir por las celebraciones del Jubileo, aunque confirmó que el Vaticano estará representado en el evento, y expresó su deseo de visitar Brasil "en el momento oportuno".
"Nos puso muy felices saber que Su Santidad pretende visitar Brasil. Será muy bien recibido con el cariño y la fe del pueblo brasileño", afirmó Lula tras el encuentro. El mandatario también felicitó al Papa por su primera exhortación apostólica, "Dilexi Te", centrada en el amor a los pobres y en la crítica a la indiferencia ante la desigualdad. "No podemos separar la fe del compromiso con los más necesitados", sostuvo el presidente de Brasil.
La reunión tuvo lugar antes de la participación del presidente brasileño en el Foro Mundial de la Alimentación, organizado por la FAO en Roma. En ese marco, Lula presentó los avances de Brasil en la erradicación del hambre y el fortalecimiento de la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, iniciativa lanzada durante su presidencia del G20.
"En 2014 ya logramos sacar a Brasil del Mapa del Hambre pero el retroceso que vivimos en los años siguientes demostró que la lucha contra el hambre debe ser perenne. No se trata de asistencialismo sino de llevar a cabo políticas de Estado", reivindicó Lula. La reducción del hambre, dijo, supone "interrumpir el ciclo de la exclusión" y, por ello, propuso a la comunidad internacional medidas "cruciales" como el alivio de la deuda de los países más pobres.
El mandatario brasileño viajó acompañado por la primera dama, Rosângela "Janja" da Silva, y por los ministros de Relaciones Exteriores, Mauro Vieira; de Desarrollo Agrario, Paulo Teixeira; y de Desarrollo y Asistencia Social, Wellington Dias. Tras la audiencia, el presidente sostuvo que hubo "mucha química" con León XIV y que ambos comparten la visión de que la justicia social debe ser el centro de la política global.
Boric y las heridas de la iglesia
Poco después, el Papa recibió al presidente chileno Gabriel Boric, con quien conversó durante 45 minutos sobre los abusos sexuales cometidos por miembros de la Iglesia y la situación social de Chile. Durante el encuentro, León XIV y Boric conversaron también sobre la exhortación Dilexi Te. "Yo no tengo el don de la fe, pero me siento convocado por ese llamado", expresó el presidente chileno.
Según relató Boric, León XIV le transmitió el dolor que le provocaron esos casos cuando era misionero en Perú y recordó lo difícil que fue para Francisco su viaje a Chile en 2018, marcado por el escándalo del obispo Juan Barros y del sacerdote Fernando Karadima. "Conversamos sobre la necesidad de que tanto la Iglesia como el Estado estén siempre del lado de las víctimas y de los más vulnerables", dijo el mandatario.
Boric también mantuvo una reunión con el secretario de Estado, Pietro Parolin, con quien trató temas de pobreza, migración y la ley de eutanasia en debate en su país. "Podemos tener diferencias legítimas, pero coincidimos en que ninguna política pública puede implicar el descarte de los más débiles", afirmó el jefe de Estado chileno.
Antes de llegar al Vaticano, Boric visitó la tumba del Papa Francisco en la basílica de Santa María la Mayor, donde dejó flores en memoria del Papa fallecido en abril. Su agenda en Roma incluye el Foro de Inversión para la Alimentación y la Agricultura y un encuentro empresarial con representantes italianos. La delegación chilena incluyó al canciller Alberto van Klaveren, la ministra Macarena Lobos y el presidente del Senado, Manuel José Ossandón.
En declaraciones posteriores, Boric recordó además los 40 años del tratado de paz entre Chile y Argentina firmado con mediación papal en 1984, y señaló que ese antecedente fue parte del diálogo con León XIV. "A propósito de esa mediación hablamos sobre Gaza y la necesidad de que la paz se construya con autodeterminación y respeto", expresó el presidente chileno.Martes, 14 de octubre de 2025